Los usuarios de de RÖHM están acostumbrados a las tecnologías de sujeción de máxima precisión y exactitud. Estas características son precisamente las que ofrece el chuck de potencia KFD-HS. “Conocemos las exigencias impuestas a las tecnologías utilizadas en procesos de mecanizado. Nuestros chucks eléctricos están diseñados para satisfacer estas necesidades”, menciona Fabian Baur, gerente de producto responsable de RÖHM.

Los chucks de potencia son clave en el montaje de piezas. Estos, tienen que sujetar las piezas de trabajo con precisión y estabilidad, y luego soltarlas con la mayor confiabilidad, una vez terminado el mecanizado. Lo mismo si se trata de mecanizado de varillas y tubos, o si se mecanizan piezas de trabajo en forma de brida, este trabajo requiere de altas fuerzas de sujeción.

En lo que respecta al mecanizado con material de varilla, el KFD-HS se caracteriza no solo por su alta flexibilidad, sino que también sirve para aumentar la eficiencia del proceso gracias a su alta velocidades de ciclo. “Manufactura económica significa fabricación automatizada”, explica Baur. En este sentido, es necesario cubrir la mayor variedad posible de piezas con el menor número de operaciones posibles y con los mínimos tiempos de mecanizado.

De hecho, el KFD-HS, que es la interfaz directa con la pieza de trabajo, cuenta con un gran potencial para ello. Gracias a su gran fuerza de sujeción y a su alta resistencia, incluso las tareas de sujeción más complicadas se pueden resolver de forma económica. “El mecanizado de precisión, la estabilidad del proceso al cambiar la pieza de trabajo y la mayor resistencia en el funcionamiento las 24 horas del día, los 7 días a la semana, son simplemente parte de ello”, agrega Baur.

El power chuck KFD-HS alcanza una gran rigidez gracias a la conexión por tornillo del cuerpo del chuck y su brida. De esta manera, este tipo de chucks ofrece las condiciones óptimas para el mecanizado preciso de piezas de trabajo, tanto de eje como de brida.

En resumen, la máxima precisión y confiabilidad, su larga vida útil, y las décadas de experiencia y el conocimiento en chucks de potencia de la firma alemana, hacen que el KFD-HS sea un éxito.